Escilia
En el centro de la naturaleza, entre
los densos bosques y bruma, hermosos hogares fueron construidos en su suelo con
paredes de blanco mármol y sobre ellas varios puentes de juncos cuelgan en
distintas direcciones que los llevan hasta livianas casitas sobre los enormes
robles aun con vida, las ventanas se encuentran cubiertas por la verde hiedra
que también trepa por sus paredes y sus puentes. La exuberante belleza de su
entorno y la armoniosa actitud de los pobladores parecen haber sido creadas por
arte de magia, que al momento de descubrir la pequeña ciudad, sabes que esta
constituye la puerta de entrada a otro mundo, el mundo de los elfos, al cual su
única fortaleza, la constituyen los linderos creados de pasajes arduos y
montañosos.
Sin embargo la constante calma de los
días anteriores a desaparecido durante la noche oscura, mientras los guerreros
de ciudad Escilia se resistían a caer ante un gran grupo de atacantes armados
con lanzas, cimitarras, mazos y jabalinas que se precipitaron de golpe sobre la
población dormida, pero no llegaron solos.
Salieron de la oscuridad del bosque
tenebroso y placido, llegaron con la noche como un gigantesco enjambre de
bestias sedientas de sangre, sus ojos brillaban en la oscuridad y de ellos
salen estrepitosos rugidos, se desplazaban por los aires como grandes aves
veloces como el mismo viento sin estar ni un solo momento al descubierto, solo
se vislumbraban oscuras capas que las cubren y utilizan como camuflaje en la
noche oscura, atacaban a la defensa de arqueros sobre lo alto de los árboles
cayendo de ellos con el rostro y el cuerpo destrozados como por grandes garras.
Por tierra, cientos de hombres armados
se desplazaban de pie con gran agilidad, destruyéndolo todo a su paso, sus
caras eran como mascaras grotescas.
El día amaneció apagado y gris, la
escena es desoladora, la ciudadela o lo que queda de ella tiene un aspecto
medroso como si habitaran en ella solo fantasmas que en forma de densa niebla
penetra hasta los últimos rincones destruidos. Un sentimiento general de odio y
venganza flota en el aire intensificándose cada vez mas entre los
sobrevivientes escilianos que buscan entre los cuerpos mutilados de su gente,
señales de vida.
El rey de Escilia contuvo su ira,
incinero a sus muertos y planto sobre sus cenizas semillas ofrecidas por la
misma vegetación y arboleda que forman parte fundamental de la ciudadela, a su
lado cinco guerreros se encuentran listos para partir tras la pista del enemigo
hasta encontrar su guarida y preparar la ansiada venganza que el pueblo
completo aclama con sollozos de dolor. Cinco guerreros escogidos por ellos
mismos y su rey, si no para vengarse, para prevenir a las próximas ciudadelas a
su paso.
El
líder del pequeño grupo se reunió con el soberano antes de su partida.
.-
nuestras sospechas han sido confirmadas señor, al frente de los atacantes se
encuentra nuestro antiguo amigo.- dijo el fiel guerrero.
.-
por fin a dado señal.- respondió el soberano aun con señal de dolor en su
rostro, por las pérdidas.
.-
ahora estamos seguros de lo que busca y veo con tristeza que no se detendrá
ante nada para conseguirlo, seguirá en la búsqueda de las dos fases que
complementan su objetivo, aunque para ello tenga que destruir todo territorio a
su paso.- añadió el Guerrero con desprecio en su voz.
.-
es obvio que su ambición a crecido, ya no desea solo un trono, si no todos los
reinos a sus pies.- puntualizo el soberano.- deben partir ahora mismo, no le
pierdan el rastro por ningún motivo, actuaras como siempre lo hemos hecho, con
discreción, para no ocasionar disturbios mayores, ni siquiera tus acompañantes
deberán enterarse, sin embargo podrás decidir compartir la información cuando
lo creas necesario.
.-
así lo haré.- contesto el líder de los guerreros.- iremos directamente a la
ciudad que oculta una de las fases de importancia, su destino ya ha sido
descubierto por él.
.-
entonces márchense ahora, buena suerte.- le dijo con firmeza y añadió.- partiré
con los sobrevivientes, regresaremos a advertir a nuestro antiguo rey.- después
de un lamentable suspiro se quedo en silencio y añadió.- estaremos listos para
cuando llegue el momento.
El grupo de guerreros partieron hacia
el sur internándose en la bruma, al anochecer llegaron a lo alto de una sierra
desde donde se puede vislumbrar su pequeña ciudad, cientos de velas iluminan
Escilia, cada una representa la muerte de uno de ellos, mientras en el aire
logran escuchar desde la distancia, con sus oídos de elfo, el delicado tono de
un lamento que les da la despedida.
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